El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, ha visitado esta mañana la instalación, acompañado por el concejal delegado de Limpieza y Zonas Verdes, José Antonio Martínez Páramo, para comprobar el resultado de las obras de rehabilitación que se han realizado durante mes y medio. Tal y como ha explicado Carabante, esta actuación se enmarca en la estrategia de «conservar, mantener y recuperar lugares emblemáticos dentro de El Retiro, como la reciente restauración de la Montaña de los Gatos, que está teniendo muy buena acogida por parte de los visitantes del parque». En este sentido, el delegado ha subrayado el objetivo del Ayuntamiento de potenciar El Retiro «como pulmón verde, pero también como pulmón cultural, educativo y de protección de nuestro patrimonio».
El foso de los monos es hoy un recuerdo, un museo al aire libre del que fue centro de referencia para miles de madrileños, especialmente niños, que se deleitaban con las hazañas de los primates en aquel lugar, donde esperaban ser recompensados con los cacahuetes y los trozos de pan que los espectadores les lanzaban desde los límites del quiosco artificial.
La Casa de Fieras y todas las zonas que lo componían, entre ellas el foso de los monos, echó el cierre en 1972 para erigirse y extenderse de forma definitiva en el zoológico de la Casa de Campo. Desde entonces, el foso se mantiene en El Retiro como una exhibición decorativa para recordar que fue parte de aquel icónico zoo y para que continúe formando parte de la memoria colectiva.
Actuación integral en todo el conjunto
El Ayuntamiento ha realizado una inversión de 148.575 euros. Las obras comenzaron el pasado 16 de agosto y finalizaron el 26 de septiembre. La restauración ha sido totalmente respetuosa con los materiales históricos del edificio. Debido al deteriorado estado de los enfoscados de los paramentos y suelos, la oxidación y falta de pintura de protección de letreros y figuras decorativas, ha sido necesario realizar una intervención integral.
Se han restaurado los suelos utilizando materiales originales y se han ofrecido soluciones constructivas adecuadas para mejorar la estabilidad de los parámetros (enfoscados de paredes con revocos de cal y mallas de fibra de vidrio) para evitar que aparezcan fisuras y grietas. La terminación de las paredes se ha realizado con una pintura transpirable especial para parámetros históricos, favoreciendo que el muro sea transpirable y no retenga la humedad en el interior, lo que deteriora enfoscados y pinturas.
En el suelo, se han restaurado todas las fisuras y las grietas con morteros de reparación y se ha aplicado una pintura especial de cloro de caucho de alta resistencia para protegerlo de las inclemencias climatológicas y el tránsito.
Los letreros y las figuras decorativas han sido arregladas, pues presentaban una importante oxidación y suciedad, al igual que las puertas de acceso al foso y las interiores. También se ha actuado en los forjados para eliminar la oxidación y protegerlos con pintura.
Con el fin de poder contemplar de cerca el resultado de estas obras de restauración llevadas a cabo en este punto de El Retiro y bajar al foso de los monos, la dirección del parque va a habilitar la posibilidad de realizar visitas en grupo mediante cita previa.