Se trata de una fuente monumental levantada en la orilla meridional del Estanque Grande, según diseño del arquitecto Isidro Velázquez, la cual estaba dedicada al dios Osiris. El proyecto primitivo poseía un fragmento de fuste de una columna que sujetaba la estatua de este dios egipcio. Su ejecución corrió a cargo de Alfonso Rodríguez, no concluyéndose hasta 1850, y se enmarca en la serie de intervenciones acometidas durante el reinado de Fernando VII para transformar el Parque como jardín pintoresco. Son muchos los nombres por los que se conoce a esta Fuente, como «La Canopa», la fuente de Osiris, la fuente de «El Mallo», que era el canal que salía del lago, y con mayor sabor popular «La Gorda», «La Tripona» o «La Preñá». Contaba con un estanque en la parte posterior y a cada lado una noria de planta cuadrada, aunque este esquema posteriormente se reformó, ocupando el sitio del primero un volumen cerrado para depósito. En 1995 se hallaba en restauración, reemplazándose las dos esfinges de escayola que la adornan por réplicas en material más duradero.