El solar que ocupa formaba parte del antiguo Palacio del duque de Medinaceli, mandado construir por el Duque de Lerma en el siglo XVII, que fue conocido por los madrileños popularmente como el Palacio del Prado. En él vivió el rey Felipe V. El palacio fue abandonado tras la muerte del quincuagésimo duque de Medinaceli en 1873 y fue demolido en 1910 dado su estado ruinoso.

El Palacio junto con sus jardines, huertas y dependencias ocupaba la enorme manzana comprendida entre la Carrera de San Jerónimo, el Paseo del Prado y las calles de Huertas, Jesús, Cervantes y la plaza de las Cortes. En el solar que ocupaba se construyeron diversos edificios, entre los que se encuentra el Hotel Palace, inaugurado en 1912 como el hotel más grande de Europa, además del Palacio Neptuno.

Hoy, completamente restaurado, destaca por la elegancia de sus salones y una espectacular vidriera, obra del artista madrileño Manuel Ortega.

© Victor Cid