Phoenix canariensis, en el Real Jardín Botánico

El ejemplar presenta las características típicas de esta especie de palmera de porte majestuoso y solemne, que puede alcanzar hasta los dieciocho metros de altura. Su tronco es grueso, de corteza fibrosa, oscura y marcada por las cicatrices poligonales que dejan las hojas al caer. La copa es frondosa constituida por un gran número de hojas pinnadas de color verde intenso con peciolo corto y espinoso. El ejemplar ha alcanzado una altura de diez metros con un diámetro de copa de seis y un perímetro en su tronco de un metro con sesenta centímetros. Se le ha calculado una edad de cien años.

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